PESADILLAS

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Esta noche me acuesto con la esperanza de tener dulces sueños...De poder dormir y descansar. Quiero dormir serena y tranquila.



Mi cuerpo está cubierto por cientos de agujas que me quitan movilidad. Me quito unas cuantas al mismo tiempo. Repito este proceso muchas veces pero no logro quitarmelas todas del todo. Ahí están. Me causan un dolor terrible. No sangro. Siempre tengo más y más agujas clavadas en los brazos. A medida que me las voy arrancando me desespero más y más, veo que tengo muchas más clavadas. Mis latidos se aceleran desesperadamente. Me despierto asustada con dolor en mis brazos. Busco asustada señales en mis brazos y aliviada obeservo que no hay agujas clavadas en mi carne. Solo fué una pesadilla.


Estoy conversando con alguien. De repente siento que uno de mis dientes está flojo. Me acerco al espejo y aterrada compruebo que ese diente se está cayendo.Y que mi aspecto es salvaje, agresivo, horrible.

Me digo que tengo que ir al odontólogo. Pasan los días y otro diente cae. Me invade el terror porque me estoy quedando sin dientes y no puedo arreglar el problema. Un día ya no me quedan dientes, tapo mi boca con pudor, horror y verguenza. Cada una de mis pesadillas ha ido arrancando un diente hasta quedarme sin ellos. Solo otra pesadilla.

Estoy llamando a la calma y al orden, todos se pelean, nadie me escucha. Entonces comienzo a gritar tratando de llamar su atención. Nadie me hace caso. Al final yo me vuelvo agresiva tambien. Siento la locura cercana.

A pesar de mis esfuerzos desesperados mi voz está muda. Me despierto alterada. Solo otra pesadilla.
Subo unas escaleras de caracol, el espacio se va estrechando más y más. Me quedo atascada. No puedo continuar. Sin embargo cuando intento ir hacia atrás compruebo aterrada que no puedo moverme tampoco. Estoy atrapada. Grito desesperada. Me despierto. Solo otra pesadilla.

Sin embargo debido a esta pesadilla recurrente ahora siento claustrofobia...
Ellas vienen una y otra vez, alteran mis horas de sueño. Tras una noche de pesadillas recurrentes me levanto cansada, con agujetas.

Intento calmar mi ansiedad diciendome SON SOLO NUBES PASAJERAS.

Antes de irme a acostar me imagino en una playa solitaria y tranquila, sintiendo la suave brisa el mar, el olor, calmando mi sed con agua de coco.


Intento relajarme, me siento flotar. Necesito flotar. Quiero flotar.


¿Como puedo ahuyentar las pesadillas? ¿Como borrarlas? ¿Como anular el miedo que infligen en mi alma y en mi mente? Me niego a vivir aterrada, teniendo miedo pueril a la hora de ir a dormir. Me abrazo a Totó, mi oso favorito.

Sigo buscando la magia constante y hermosa de la vida.

Son las cuatro y media de la madrugada. Totó y yo nos vamos a tener dulces sueños.
Eso espero. Eso quiero. Eso necesito...